Cómo conseguir ahorrar sin endeudarse por el camino

¿Te sucede que por más planificación e investigación que hagas sobre cómo ahorrar, sigues sin dar con algo en concreto que te pueda servir y realmente ver frutos de tus intentos por ahorrar? A todos nos ha pasado. A ti, a mí, a tú vecino, tu pareja, padres y amigos.

Es cierto que cada quien tiene necesidades y gasto que hacer en el día a día, semanal o mensualmente, y puede que estés ganando una miseria o ganas lo suficiente pero aun así no ves ningún ahorro.

No te preocupes tanto, ya que hoy te daremos algunos consejos para que sigas haciendo lo que hace y puedas ahorrar poco a poco sin tener que endeudarte durante el intento.

¿Qué hacer para ahorrar y no endeudarse?

Ten en mente una cosa y siempre recuérdala cada vez que sientas que no puedes ahorrar… puedes y lo harás. No es fácil, no vamos a mentirte en esto, y más aún si llevas cierto estilo de vida donde tienes que gastar constantemente.

Los siguientes consejos te ayudarán a pensar y poquito más y no caer en las deudas.

Estudia y controla los gastos que haces cada día

• Puede que te aparezca un poco obsesivo, pero es la única manera de que veas las razones por las cuales te has estado endeudando. Al final de tu estudio y análisis, entenderás por qué motivos tienes deudas, por muy pequeñas que sean.

Ahora bien, ¿cómo haces el estudio?

• Puedes hacerlo de cualquier forma siempre y cuando puedas recopilar información sobre tus gastos, llevar un control, hacer una separación entre los gastos necesarios y los innecesarios.
• Bien puedes utilizar un bloc de notas, el paquete de Microsoft office o irte a algo más moderno y efectivo, las aplicaciones. Porque si, en el mundo de las apps, existen algunas que te ayudan con estas tareas.
• Lo bueno de estas aplicaciones es que puedes ir anotando los gastos que haces durante el día y durante un mes entero, cuáles son tus fuentes de ingresos, la cantidad, lo que debes lo que tendrás etc.
• Al final de cada mes (o como lo tengas configurado), reflejará el total de lo que has ganado durante este periodo, lo que has gastado y lo que pudiste ahorrar.

¿Cuáles son la ventaja de las Apps de ahorro?

Que te ayudarán a visualizar mucho mejor qué gastos fueron innecesarios, cuando tuviste que haber gastado o si lo que compraste era necesario.

Así de simple. No hay mejor forma de ver todo esto y controlar tus finanzas que con una App de ahorro.

Gasta o compra lo necesario

Si estás viviendo en un alquiler, tienes que enfocarte primero en cuáles son tus gastos de primera necesidad en función de lo que ganas al mes, y según sea la modalidad de pago que tengas.

Después de esto, tienes que ir por aquello que no es tan primordial, pero si necesario para sobrevivir en el día a día. Para hacerlo más práctico o atendibles, vamos a resumirlo de la siguiente manera:

• Pago del alquiler
• Pago de servicios (los que tengas disponible y uses).
• Artículos de aseo personal.
• Artículos de consumo diario y alimentos.
• Manutención básica del coche en caso que lo tengas.
• Ya el resto de los gastos, son opciones o no tan necesarios como estos. Pero dependiendo como sea tu estilo de vida, puedes:
• Dejar el ocio para cuando no tengas deudas.
• Limitar los viajes que no tengan ninguna utilidad o beneficio para ti.
• Regalos, peluquería, cena o almuerzo en restaurantes, etc.
• Comprar ropa o accesorios.

Lo más común es ver a gente que se enfoca más en estos últimos cuatro puntos, mientras que van solucionando cómo pagar los cinco elementos clave, aunque no está del todo mal, todo depende de la cantidad que ganes al mes, pero independientemente de esto, tienes que controlarlo y encontrar un balance.

Encuentra el balance entre lo necesario y lo opcional

• No te podemos decir que parar ahorrar y no endeudarte tengas que dejar de lado los gastos personales que te hacen sentir bien. Como un helado, un dulce, una comida, etc., pero la cantidad de veces sí que tienes que controlarlo.

• Pero resulta más práctico que puedas pagar las cosas indispensables y al mismo tiempo elijas una dos cosas opciones. Es decir, puedes pagar todo lo necesario para estar bien en tu lugar de residencia o alquiler y comprar algún servicio de ocio.
• De no ser así, imagínate que tu ingreso mensual sea de 1000 euros y solo los pagos necesarios son casi 500 o 600 euros.
• Como ves, un margen de dinero que puedes usar en ti bastante amplio, tenderás a gastarlo en cosas innecesarios. Llegará un punto donde ya no tengas más y optes por pedir un crédito en el banco, o algún prestamista, familiar o amigo.
• Y que esto no solo lo hagas un mes, sino todos los meses, ya que se convertiría en parte de la lista de pagos obligatorios o necesarios por verte obligado a pagar una deuda y que si no lo haces, te pueden embargar, quedarse con algo tuyo de valor hasta que pagues la deuda y más.

Pero no tiene por qué ser así, comienza teniendo en cuenta estos tres consejos y en dos meses, comenzarás a notar lo grandes cambios.